En años recientes el término mipyme, que signfica micro, pequeñas y medianas empresas, ha cobrado mucha vigencia a nivel internacional.  Los diferentes organismos gubernamentales a cargo del comercio y la industria incluyen departamentos para trabajar con estas organizaciones.  La forma de categorizar a estas empresas depende de cada país, pero en sentido general, el concepto va dirigido a las empresas de menor tamaño cuando se compara con los grandes competidores de los diferentes sectores.

El Ministerio de Industria y Comercio de República Dominicana cuenta con un Viceministerio de Fomento a las Mipymes.  Tan reciente como el 30 de junio de 2018, el Viceministro de Mipymes informó que las micro, pequeñas y medianas empresas aportan el 38.6% del PIB del país.  Este porcentaje llega a más del 50% en algunas naciones.

En Estados Unidos, el 89.6% de las empresas tiene 20 empleados o menos.  En Irlanda, el 92.2% de las empresas tiene 10 empleados o menos, generando casi la mitad de las ventas.  En Corea del Sur, una de las economías más admiradas, las mipymes representan 99% de las empresas, 88% del empleo total y 51% de las exportaciones de la 11va economía y a 8va potencia exportadora mundial.

Son los grandes nombres, las marcas reconocidas, las que evidentemente llaman la atención del público.  Da la sensación de que una empresa grande es sinónimo de éxito y eficiencia, y no necesariamente es así.  Puede que también se tenga la percepción de que sólo los grandes están mejor posicionados para competir, y esto no siempre es cierto.  Ante la realidad de un mundo cambiante, retador, cada vez más globalizado, con incremento de alianzas y fusiones, ¿es posible que las pequeñas empresas puedan competir favorablemente?  Sí lo es.

Small is beautiful

Cada país tiene una realidad económica diferente.  Eso no se discute, y en algunas sociedades, no todos los modelos económicos favorecen a los de menor tamaño.  Independientemente de las sociedades, la gran ventaja que tienen las mipymes es que pueden conocer a sus clientes con mayor facilidad.  La parábola cristiana del buen pastor es una ilustración: el buen pastor conoce a sus ovejas y sus ovejas le conocen a él.  Quien dirige la organización, si maneja bien su negocio, conoce su mercado, o por lo menos debe conocerlo.

Un artículo de Financial Times del 10 de junio de 2018 recoge la historia de que hay muchas quejas de la cabina de los nuevos aviones Boeing 737 Max de American Airlines.  Los pasajeros entienden que los espacios son muy reducidos, no sólo de los asientos, sino también de los baños.  Se menciona además a Doug Parker, el oficial ejecutivo en jefe de la aerolínea.  Dice el artículo que “Un bloguero fue el primero en escribir en enero que el Sr. Parker les había dicho a sus empleados que él no había estado en el avión, algunos de los cuales ya se habían lanzado dos meses antes”.  Quien dirija una aerolínea mipyme probablemente entra en su avión y se sienta, y tiene más propiedad para hablar de lo que experimentan los clientes antes de emitir declaraciones sobre las inversiones más recientes en aeronaves.

Hay que tomar en cuenta que el uso de los productos (incluyendo servicios) de la empresa por aquellos que dirigen las organizaciones no es garantía de éxito.  Hay que ir más allá y asegurarse de que el producto satisface las expectativas de los clientes.

Otra de las ventajas de las empresas de menor tamaño es la mayor rapidez en la toma de decisiones.  No hay que llevar los casos a varios niveles el escalamiento o aprobación ni estar sujetos a presupuestos rígidos.  En un hecho verídico, una empleada del área de ventas conversaba con el dueño de una empresa y le sugirió no comprar más de ciertos productos.  “¿Por qué?”, le preguntó el dueño.  “Porque eso no se vende”, le contestó la empleada.  Naturalmente, este diálogo debería llevar a una revisión de los datos que sustentan la afirmación, pero también hay cosas que no se reflejan en los indicadores.  Quien trabaja directamente con los clientes sabe de sus preferencias y deduce hacia dónde soplan los vientos.  En este caso, la ventaja de las empresas de menor tamaño es que la retroalimentación es más directa y llega más rápido donde quien toma las decisiones.

Otro ejemplo real es el de una empresa pequeña que fabrica productos para construcción en el interior del país.  Al caer la tarde, el dueño va manejando hacia la capital y recibe una llamada del representante de un importante proyecto, que urgía completar una fase de la construcción.  Se trató el tema de la situación de apremio del cliente.  Ambos acordaron los precios y los términos de pago.  Se hizo el negocio.  El dueño llamó a la empresa, dio las instrucciones de lugar y se hizo la entrega el mismo día.  En una empresa grande probablemente no se hubiera agilizado el proceso como en este caso.

Tecnología al alcance de todos

Las empresas grandes hacen cada vez mayor uso de la tecnología, y es que, al ser grandes, para poder competir, necesitan de sistemas inteligentes o que les faciliten gestionar sus procesos.  Ahora bien, muchos clientes buscan la experiencia de un trato personalizado en vez de interactuar con un sistema automático o inteligente.  En algunos casos esto va en detrimento de la organización.

Actualmente hay mucha información disponible en internet, y también hay soluciones muchas veces gratis o a precio asequible para las mipymes, que se ajustan a sus necesidades.  Estas herramientas les pueden ayudar a satisfacer a sus clientes y lidiar con las problemáticas cotidianas.

No importa la economía que sea, las mipymes tienen un lugar en la dinámica empresarial.  La frase de Winston Churchill es aplicable a cualquier empresario: “Algunas personas consideran la empresa privada como un tigre depredador que se debe matar. Otros la ven como una vaca que se puede ordeñar. Sólo unos pocos la ven como lo que es, el caballo fuerte que hala la carreta”.

¿Se considera su empresa una mipyme?  ¿No sabe cómo proceder o no le alcanza el tiempo para tratar con tantos frentes al mismo tiempo?  Si usted necesita ayuda, también hay opciones de asistencia de gestión o técnicas disponibles para usted, a través del gobierno o de organizaciones empresariales.  Es probable que una de estas opciones sea otra mipyme.